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¿Has sufrido depresión? ¿Conoces a alguien que la tenga?
La depresión es una enfermedad tan antigua como la Humanidad e incluso más que ella. Como prueba vemos que nuestros queridos animales de compañía (que comparten antepasados con nosotros en la Evolución) también pueden deprimirse. Por tanto, si nuestras mascotas, que no sufren el estrés diario de los humanos, también se deprimen, la depresión no puede ser considerada nada más que una consecuencia de nuestro frenético estilo de vida actual.
La verdad sobre la depresión: te vuelves incapaz de vivir tu vida.
La depresión, esa enfermedad silenciosa, incapacita a 1 de cada 10 españoles para hacer sus tareas cotidianas. Incluso es señalada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como la segunda enfermedad más incapacitante del mundo , sólo superada por los ataques de corazón y los ictus.
Tengo depresión. ¿Y ahora qué hago?
Por desgracia, no sólo tendrás que luchar contra tu depresión (que no es poco), también tendrás que soportar los comentarios de familiares y amigos que dudarán de que estés «realmente enfermo/a» o si sólo «eres vago/a» o «quieres llamar la atención».
¡Será que no hay nada mejor para pasar el tiempo que fingir estar enfermo o darle pena a los demás!
¿A que cuando te rompiste la pierna, nadie dudó que tenías un hueso roto y no podías andar?
Lo primero que debes saber es: no eres culpable de estar deprimido/a. Bastante mal lo estás pasando ya, para encima sentirte culpable de algo que no depende de ti, o acaso ¿alguien desea sentirse mal?
¿Y cómo puedo solucionar mi depresión?
Tienes varias opciones, aunque todas requerirán que te comprometas mínimamente con las soluciones que te muestro para que te funcionen y alivien tu depresión.
A) Esperar y no hacer nada: si no haces nada y sólo esperas unos meses, en algunas ocasiones, la depresión se resolverá sola.
A favor: es la opción más económica de todas las que te mostraré.
En contra: corres el riesgo de que empeore la depresión y se haga crónica; pudiendo acabar ingresado en el hospital; o incluso en el suicidio.
B) Pedir ayuda a tu Médico de Cabecera: es una opción razonable. En la mayoría de ocasiones te prescribirá fármacos para la ansiedad y, a veces, para la depresión. Si te ve muy mal, te pondrá en una lista de espera considerable para que te vea el psiquiatra; espera que se te hará eterna debido a tu malestar.
A favor: es una opción razonable si no dispones de muchos medios económicos.
En contra: en la mayoría de casos, los médicos de cabecera no disponen del tiempo ni conocimientos suficientes para tratar adecuadamente la depresión, por lo que es común que las personas acaben volviéndose adictas a los fármacos o se haga crónica su depresión.
C) Ponerse en lista de espera para ser atendido por el Psiquiatra: es una buena opción, ya que este profesional es especialista en Salud Mental y puede prescribir fármacos. Además puede enviarte a hacer psicoterapia con el psicólogo o puede prescribirte fármacos que no sean adictivos y que te ayuden a mejorar.
A favor: es el especialista que puede recetarte o enviarte a psicoterapia y sabe tratar la depresión.
En contra: la lista de espera suele ser de varios meses, lo que suele ser demasiado tiempo para alguien que está pasándolo mal en ese momento (¿te imaginas que te rompes el brazo y tarda 3 meses en verte el traumatólogo? Absurdo, ¿no?). Además la duración de la consulta es breve y el seguimiento no se hace con la frecuencia necesaria por falta de tiempo y una agenda sobrecargada de gente.
D) Envío al Psicólogo para hacer Psicoterapia: es el profesional que puede realizarte una psicoterapia para tratar tu depresión sin usar fármacos, al menos de entrada.
A favor: es la opción más económica de todas las que te mostraré.
En contra: además de la lista de espera para que te vea el psiquiatra, ahora tendrás que esperar otra importante lista de espera. Aunque lo peor es que la frecuencia recomendada (debería ser una vez por semana, según la Organización Mundial de la Salud) es imposible de cumplir en el sistema público, así que hará lo que pueda viéndote entre una vez al mes y una vez cada tres meses, puede que más con la situación actual.
¿Existe otra solución que no implique esperar entre 3 y 6 meses a que me vea un experto?
Sí. Sí existe, aunque, como todo en esta vida, implica realizar un esfuerzo económico.
Las opciones que tienes a tu disposición son:
E) Acudir a un psicólogo privado: es una buena opción. Suele tener una lista de espera inferior a un mes y puede verte con la frecuencia que necesitas (generalmente de forma semanal) hasta que se soluciona tu depresión.
A favor: si tiene la formación y experiencia adecuada, el tratamiento suele ser efectivo.
En contra: el coste ronda los 50-100 euros por sesión y se necesitan varias semanas de tratamiento, no es suficiente una o dos sesiones. Hay mucha gente que se definen como terapeutas y no tienen la formación necesaria o no se basan en la ciencia, aplicando técnicas caras e inútiles. Merece la pena asegurarse en manos de quién pones tu salud mental.
F) Acudir a un médico psiquiatra privado: es también buena elección. Evaluará tu caso, y según la gravedad considerará prescribirte fármacos o realizarte psicoterapia.
A favor: es el médico experto en Salud Mental, se asume que sabe abordar una depresión o, más aún, que es experto en tratarla si se define como tal.
En contra: aunque todos sean psiquiatras, hay mucha variabilidad, los hay mejores y peores (como en cualquier profesión). Pero sin duda, lo más importante es que conozca y sepa aplicar los tratamientos más eficaces y actuales, si no los conoce, su capacidad para solucionar la depresión estará limitada. El precio suele oscilar entre 100 y 200 euros por consulta.
G) Acudir a un médico privado especialista en plantas (fitoterapeuta): es una alternativa cada vez más frecuente. Mucha gente, no sólo en España, solicita tratamientos con plantas medicinales, más acorde con su estilo de vida y sus creencias.
A favor: es una opción eficaz, natural y viable en la mayoría de problemas de salud mental.
En contra: existen algunas enfermedades que no pueden tratarse con plantas. También suele ser necesario complementar con psicoterapia. Lo peor es que si no es un médico experto quien lo supervisa, sino que es un herborista o uno mismo, pueden producirse efectos secundarios graves e incluso poner en peligro la propia vida. El precio por consulta oscila entre 100 y 200.
En conclusión: ¿Qué me recomiendas para solucionar mi depresión?
Mi consejo como experto es:
1) Si te sientes mal, pide ayuda. Háblalo con tus amigos y familiares, algunos no te comprenderán, pero otros harán lo posible por ayudarte.
2) El Médico de Cabecera, no es la mejor elección, pero es una opción aceptable si no tienes suficientes recursos económicos.
3) Si puedes permitírtelo, acude a un psicólogo o psiquiatra experto en depresión, con titulación oficial y conocimientos actuales.
4) Huye de quien te ofrezca terapias y tratamientos alternativos que no tengan ninguna base científica. Sólo te hará perder tu tiempo y dinero.
Eso es todo, si te ha gustado el post, no dudes en dejar una opinión o compartirlo con las personas a las que pueda interesarle.
¡Mucha salud!